Zhang

Un día recibí un mensaje por WhatsApp. Era de un número que no tenía registrado. Esta persona me preguntó si tenía disponibilidad el 15 de ese mes ya que venía a Lima. Le pregunté quién era. Me dijo que se llamaba David Zhang y yo le dije que no lo conocía. Pero él sabía mi nombre y apellido. Me dijo que era el jefe de GIT en Seattle y que si yo trabajaba en Fexdex. Le dije que no y le pedí una foto, me la mandó (era asiático) y no lo conocía. Así que me dijo que le había dado mi número una persona de Fedex de Lima. Le dije que era un mal entendido. Me pidió disculpas y me dijo que iba a averiguar con Fedex lo del número y que de ahí me daba una respuesta. 

Yo pensé que no me iba a volver a escribir, pero después de unas horas me contestó. Me dijo que el número que le dieron era incorrecto, que los dos últimos dígitos estabas al revés. Y que lo disculpara por el error. Yo le dije que no había problema y que tuviera una buena estadía en Lima. Él me dijo que lo mínimo que podía hacer era invitarme a cenar. Y bueno, le acepté la invitación. Me dijo que llegando a Lima me avisaba cuándo podía.

Yo pensé que ahí iba a quedar el chat pero me siguió escribiendo. Chateamos un rato. Me contó que trabajaba en logística, en USA, llevando productos de China a Estados Unidos. Me contó sobre él, que era de Taiwan. La verdad en la foto no se le veía mal, pero no es mi tipo para nada, nunca me han gustados los asiáticos. 

Con el paso de los días (pocos días) me contó sobre su trabajo, su familia y su rutina. Parecía interesado en mi, me dijo que era bonita. Y yo le conté un poco de mí, pero sin darle mucho relleno. Siempre con cuidado, no es bueno darle mucha información a un desconocido. 

Me escribía un mensaje de buenos días y luego a lo largo del día. Me mandaba fotos y videos de lo que estaba haciendo. Todo me pareció verdad, no me daba indicios de que estuviera mintiéndome. La verdad me sentí muy bien de que un chico me escribiera demostrando interés y conversando de todo un poco. 

Después de unos pocos días me mandó un mensaje de buenos días, yo le contesté. Luego, en la tarde le mandé un par de fotos desde el gym. Y lo raro fue que las vió y no me contestó nada. Él siempre contestaba. Pero bueno, me imaginé que estaba ocupado. Luego, en la noche, le mandé un mensaje, pero no pasó. Pensé que estaba sin batería. Al día siguiente mandé otro mensaje pero no pasó. Eso ya me pareció raro, un hombre de negocios como él no tendría su celular apagado.

Pensé varias opciones, pero la que creí más probable era que me había bloqueado. Le escribí a un amigo y le pregunté cómo se sabe si alguien me bloqueó e hicimos una prueba. Efectivamente aparecía el mensaje como que no pasaba, ósea sólo un check. Por lo tanto me había bloqueado.

No sé lo qué pasó. No hubo ningún mal entendido. Pero bueno, las cosas pasan por algo y para algo. Podía haber sido un mal hombre, o un estafador, o hasta estar metido en algo turbio. De seguro fueron Dios y los seres de luz que me estaban librando de algún mal. Así que pues, me dolió pero, fue lo mejor. Hay que tener mucho cuidado con los desconocidos. Y eso de que obtuvo mi nombre y número de alguien de Fedex de Lima, no me convence. Así que gracias Dios, gracias seres de luz y gracias universo por haberlo sacado de mi camino.